El alma es sencilla.
Dime que sientes.
Y es esa tu alma.
La idéntidad del alma con el alma se llama Yo.
Por tanto, tu yo es un estado ausente de alma.
Porque si quieres entender que es el alma tienes qué empezar a comprender qué eres dios.
Ese dios que no es distinto del dios qué ves en el interior y qué en ti lo niegas llamandole yo
¿Por que te haces eso?
¿Por qué ensucias a dios?
¿Por qué manchas la tierra?
O, más simplemente, ¿por qué tanta indiferencia?
El problema del alma es su indiferencia.
El alma solo puede ser expresada expandiendo amor.
Y si no lo hace, surge la nostalgia.
El único infinito a tu alcance es tu alma. Este como este.
Si no cuidas de ella, el resto se escapa.
Si no amas, ¿qué esperas?
...no le busque sentido, no lo tiene
miguel mochales, maestro zen.
domingo, 27 de julio de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario